La amistad es un vínculo especial que debería nutrirnos emocionalmente, darnos alegría y apoyo incondicional. Sin embargo, en ocasiones, nos encontramos en situaciones en las que algunos amigos parecen menospreciarnos. La amistad tóxica puede tener muchas caras, hoy nos vamos a centrar en amigos que nos menosprecian.

Si un amigo te menosprecia, esto puede ser una experiencia dolorosa, pero es importante recordar que tu valía como persona no está determinada por la percepción de los demás.

¿Por qué nos pueden menospreciar?

Para abordar esta situación, primero debes comprender la dinámica detrás de por qué algunos amigos pueden menospreciarnos.

A menudo, esto se debe a sus propias inseguridades, envidia o problemas personales que proyectan sobre nosotros. Es importante que recuerdes que esto no es un reflejo de tu valía, sino más bien de sus propias luchas internas. También hay personas que carecen de empatía. Esto puede hacer que sean más insensibles hacia los demás. Algunos patrones de comportamiento aprendidos en la infancia también tienen mucho que ver en estas situaciones.

¿Qué podemos hacer ante una amistad tóxica?

Primero: Fortalece tu autoestima

El primer paso para afrontar esta situación es fortalecer tu autoestima. Reconoce tus propias cualidades, logros y valores. Puedes probar a realizar una lista de tus fortalezas y logros personales. Esto te recordará tu valía intrínseca y te ayudará a mantener una imagen positiva de ti mismo.

Segundo: Establece límites sanos

Una vez que te sientas seguro de tu valía, es fundamental establecer límites sanos en tus amistades. Aprende a identificar las relaciones tóxicas y a poner límites cuando sea necesario. Esto implica ser asertivo y comunicar tus necesidades y expectativas de manera clara y respetuosa.

Cuando establezcas un límite, sé claro y específico en tu comunicación. Evita generalidades o ambigüedades. Explica cuál es el comportamiento que te está afectando y por qué es importante para ti llevarlo a cabo.

Recuerda: Una vez que hayas establecido un límite, es importante hacer cumplir ese límite. Esto implica tomar medidas si la otra persona continúa cruzándolo. No comprometas tus límites por temor a la confrontación.

Tercero: Comunícate con tu amigo

Hablar abierta y sinceramente con tu amigo puede ayudar a resolver malentendidos o problemas subyacentes. A veces, las personas no son conscientes del daño que están causando. Abordar la situación con empatía y escuchar activa puede abrir la puerta a una conversación constructiva. En el caso de que tu amigo no quiera escucharte y se ponga a la defensiva… ahí tendrás la respuesta.

Consejo: Escoge el momento adecuado. A menudo, solemos decir lo que no nos gusta en mitad de una discusión. Siempre que vayas a comunicar a otra persona algo importante debes escoger un momento tranquilo y privado para hablar.

Doble Consejo: Utiliza el “yo” en lugar del tú”. Por ejemplo: En vez de decir: “Tú me has hecho mucho daño diciendo eso de mí”. Prueba a decir: “Yo me he sentido mal cuando me has dicho eso”.

Cuarto: ¿Es hora de marcharse?

En algunos casos, puede ser necesario distanciarte de amigos que continuamente te menosprecian y afectan negativamente tu bienestar emocional. Prioriza tu salud mental y bienestar. No tienes la obligación de mantener relaciones que te hagan daño. Queda con nuevas personas, haz planes distintos. Permítete la oportunidad de conocer gente que merezca la pena.

Quinto: Busca apoyo cercano

Recuerda que no estás solo en esta experiencia. Habla con otros amigos con lo que sientas confianza o con un familiar. Compartir tus sentimientos y obtener perspectivas externas puede ser extremadamente beneficioso. Hablar de nuestras preocupaciones hace que las emociones avancen y no se estanquen dentro de nosotros.

Si sientes que las palabras de tu amigo están afectando significativamente tu bienestar emocional o tu autoestima, considera hablar con un profesional de la salud mental. Un psicólogo puede ayudarte a explorar tus sentimientos y proporcionarte estrategias para manejar situaciones difíciles.

Sexto: ¿Puedes sacar algo positivo?

Reconoce que enfrentar este tipo de desafíos puede llevarte a un crecimiento personal significativo. Aprendes a valorarte más ya establecer relaciones más saludables en el futuro.

Recuerda, tu bienestar es una prioridad. Identificar y abordar una amistad tóxica es un paso valiente hacia una vida más saludable y feliz. A medida que te rodeas de relaciones más positivas, te acercas a un futuro más brillante y armonioso.

¿De verdad no quieres probarlo?

Con mucho amor,

Noelia.

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